Crying Freeman es una obra de dos conocidos y exitosos autores de manga para adultos: Kazuo Koike y Ryochi Ikegami.
Hay que aclarar que cuando se usa el término manga para adultos no estaban haciendo referencia a manga de contenido sexual, sino a mangas que por su guión y sus historia no entra dentro del comic que habitualmente se dirige a un público adolescente. El manga para adultos suele gozar de unos guiones más complejos, drámaticos y realista aún siendo dentro de un género de ciencia ficción. Las imágenes son más crudas y los dibujos están mas cercanos a las proporciones reales del cuerpo humano.
Tambien podemos encontrar mangas para adultos que traten sobre la vida cotidiana de un padre de familia pero son el tipo de historias que no veremos en nustras estanterias occidentales puesto que gran parte del consumidor de mangas tiene una media de edad que oscila entre los catorce y dieciocho.
Los autores de este manga de culto ya han trabajado juntos en otras historias y demostraton tener una notable química entre ellos dando a luz a destables mangas como han sido; Kizuoi-nin y La paloma roja Apil y Offered. Ryochi Ikegami es el dibujante y Kazuo Koike el guionista.
La acción comienza cuando un día Emu Hino esta en un mirador, pintado con oleo el paisaje de Tokio. De pronto escucha unos gritos y unos diparos. Aparecen dos hombres sinedo perseguidos por un tercero que viste con ropas chinas. El hombre de aspecto chino dispara certeramente dándole al que va más retrasado, él otro se vuleve y suplica; “ No me mates Freeman. Somos colegas, ¿no? Si quieres dinero te daré todo el que me pidas”
Pero el llamado Freeman no atiende a razones, dispara y lo mata, abriéndole un agujero en la frente. El asesino se queda quieto y de sus grandes y expresivos ojos comienzan a manr lágrimas. Y Emu piensa; “ unas lágrimas silenciosas rodaron por sus mejillas. Brotando se sus ojos sin cesar como el agua que fluye de un manantial”
Después Freeman destruye el arma y corre hacía Emu, ésta lo mira, temblando, y le entrega un pañuelo para que él acepta. Se seca al agua salada que brilla en los bellos ojos.
Ella se presenta; “ Me llamo Emu Hino” y él le responde; “ Yo me llamo Yoo en japonés se escribe con la misma letra que designa horno de cerámica”
Emu ya sabe que va a morir porque en China cuando un asesino se identifica ante ti, en realidad está dicendo: “tú será mi próxima víctima”. Pero Emu, hija de un político corrupto se siento muy sola y en esa soledad ese hombre hermoso y mortal se convierte en su obcesión. Así se propondra que Freeman le haga el amor antes de matarla.
Como se iremos descubriendo más adelante, Freeman en realidad es un escultor japonés que cayó en mano de una tríada (mafia china) llamada los 108 dragones. Éstos hicieron de Freeman su obra maestra; el asesino entre asesinos. Impusieron mediante hipnosis una disposición mental, de tal forma que cuando le ordenan matar él no puede dejar de hacerlo. Solo cuando ya ha matado es cuando sale de su estado de esclavitud y entonces llora porque su alma se rebela una y otra vez contra el mandato. Crying Freeman es el nombre en clave que la organización de los 108 dragones le da, cuando trascurre más historiua veremos que siempre ha existido un Freeman.
La historia trasncurre en medio de la relación entre Emu y Freeman, descubriremos los entrecijos de la sociedad de los 108 dragones, los yakuzas, la corrupción de la policía y el amor que no atiende a razones e ignora todo tipo de cirncunstancias. Hay sangre, sexo, romance que baila en el borde una navaja. Un dibujo excelente acorde con su magistral guión.
Existe una adaptación en anime y en imagen real pero, desgraciadamente, ninguna le roza los talones a esta maravilla de manga. Muy recomendable e inolvidable. Una cosa es segura, no te dejará indiferente.
